viernes, 30 de abril de 2010

A las tantas de la madrugada

Pienso, luego existo. Afirmó Descartes. Y cambio el pensamiento del Universo que se tenía hasta entonces.
Sin entrar en un debate filosófico, no es el tema que queremos abordar, diremos una vez superado el pensamiento de Descartes "Existo, luego pienso". Vivir es interactuar con el mundo que nos rodea, es elección, es duda, sufrimiento. Vivir es sufrir.
¿Cuál es la causa?. Salvando las enfermedades, las catástrofes naturales, todo ello inherente a nuestra voluntad, vivir es sufrir porque el mundo que nos rodea no se rige por la razón. El capitalismo no es el mal en si mismo, es una expresión del hombre que vive, que existe. Hombre que vive oprimido por el mundo que le rodea, ya que el mundo que lo rodea es reflejo del hombre que lo habita. ¿El hombre necesita al planeta?. El planeta no necesita al hombre. El hombre es un mal para el planeta.
Me pregunto: ¿El hombre es bueno o malo por naturaleza?. Hobbes decía que el hombre es un animal miedoso, y por ello, agresivo y violento. La sociedad lo protege y le permite desarrollarse plenamente. Freud afirmaba que era instintivo y la sociedad un sistema represor. Un mal necesario. Resolveremos esta cuestión más adelante. Diremos por el momento que es egoísta. El egoísmo es una cualidad humana. Relativo a la poseción. ¿Materialismo?. Afirmemos primeramente, el materialismo, la propiedad privada, la poseción es un factor de opresión para el alma del hombre. ¿Tendrá algo que ver con aferrarse a la vida?. La irreversible fatalidad de nuestro destino marca esa necesidad de aferrarnos a la vida. Nacemos para morir. Se nos brinda un suspiro para sentir nuestra existencia. A medida que vayamos desarrollando nuestro razonamiento dichas dudas se irán despejando. Paciencia.
¿Es posible vivir nuestra vida?. ¿Es el mundo el que nos oprime?. No, el sistema en que vivimos.
Reflexionemos un instante, ¿ha existido algún momento de la historia del hombre en que no haya existido la opresión?. Desde que existe la razón, entiendo por razón aquella capacidad diferenciadora de los animales, el pensar, el cogito, siempre ha existido opresión.
Entonces, ¿por qué el hombre si razona, es el único ser que oprime a sus semejantes?. Recalcamos en este punto, los animales no razonan. ¿Por qué el hombre envidia?. Conocéis algún loro que haya visto pasar por la calle a un perro y haya pensado, "caramba como me gustaría tener ese pelaje". Sólo se puede envidiar lo que no se tiene y se desea. Resolvamos esta cuestión. Como hemos afirmado, el hombre es el único ser que es capaz de razonar. Y hay está la solución. El hombre posee el don más perfecto de la naturaleza, que a la vez es su mayor pecado. Existo, luego pienso. El hombre al razonar se da cuenta de su existencia, y en ese mismo instante de su individualidad. La individualidad es producto de la capacidad de razonar. Y ella de darnos cuenta nuestra realidad y de la de los demás. El hombre al razonar descubre su individualidad. Para envidiar no solo hace falta darnos cuenta de nuestras diferencias con los demás, es necesarios algo todavía más ajeno a nuestra naturaleza. Las costumbres, la experiencia aprendida. Es decir, el aprendizaje es el mutilador de la experiencia vital. Para vivir plenamente sin opresión habría que desocializarse. Nos enseñan lo que esta bien y lo que está mal. No nos permiten elegir. Pero por que debemos aceptar lo preestablecido a nuestra naturaleza sino se rige por la razón.
¿Es el hombre un ser sociable por naturaleza?. No, lo es por necesidad. El aprendizaje, la moral, las leyes son determinadas a priori al ser que nace, le son impuestas por la sociedad.
Afirmo, el hombre es bueno por naturaleza, sociable por necesidad. Es decir, la sociedad cambia la naturaleza del hombre. Es un tóxico opresor, por qué no se rige por la razón, pero el hombre la acepta para su necesaria subsistencia.
El hombre viene al mundo encadenado, y debe luchar para sentir el palpito de la vida antes de su muerte. Por ello pasamos de "Pienso, luego existo" a "Existo, luego pienso". Vivir es elegir, decidir, interactuar. Dejarse someter por la sociedad y su moral, es lo contrario. No decidir, es no vivir.

domingo, 25 de abril de 2010

El crash del 2010

Terminé de leer hace dos días un libro titulado "El Crash del 2010" (Toda la verdad sobre la crisis) del escritor Santiago Niño Becerra, que va por la 12ª edición. El libro hace un análisis del por qué de la situación actual y argumenta que en 2010 comenzará la verdadera crisis del sistema económico actual, no siendo una más de las ocurridas sino su fin. Entre otros factores destaca el agotamiento de los recursos naturales y energéticos, y la especulación crediticia.
Según el autor entre 2010 y 2018 nuestro sistema económico morirá dando paso a otro sistema.
Como argumentabamos hace días, los recursos naturales y energéticos tienen fecha de caducidad, y con ello, nuestro sistema. La economía de decrecimiento será, a mi modo de ver, un periodo de regulación y de ajuste de los desequilibrios que el hombre a realizado. Yo lo encuadraría entre los años citados por el autor 2010 al 2018, siendo muy optimista. Creo que el ajuste será más duro, y los efectos sobre el sistema tendrán que ser más debastadores.
¿Podría una tecnocracia regir un mundo deborado por la codicia capitalista?, ¿podría restructurar los restos de tan grave decrecimientos?. ¿Cómo se puede colocar a una masa ingente de desempleados sustentar?, ¿los poderes actuales lo permitirían?.

sábado, 24 de abril de 2010

Una verdad.

El error no está en errar, sino en no intentarlo por miedo a errar.

Hemos vuelto para errar y aprender de nuestros errores.

Bienvenidos.

jueves, 15 de abril de 2010

Aviso.

Estimados lectores,

Entre el 16 de abril y el 23 del mismo mes, por motivos personales, no habrán nuevas entradas en el blog. Eso no significa que podáis seguir participando y dejando vuestras opiniones y sugerencias.

Atentamente,

domingo, 11 de abril de 2010

Economía de decrecimiento

¿Sabéis que hay estudios que indican que al ritmo que crecen países como la India y China, y en general, la población mundial, en el año 2040, consumiremos cuatro veces más que lo que la tierra puede producir?
Es un hecho irrefutable, técnicamente sin solución. La tierra no podrá abastecer a la población mundial en apenas 30 años.
Os habéis preguntado alguna vez lo siguiente. El planeta necesita al hombre o el hombre necesita al planeta. Parece evidente, el planeta no nos necesita. Es más somos un problema.
Ante dicho hecho, algunos piensan que la solución es el control de las tasas de natalidad. Personalmente, no creo que sea la solución. Me explicare. Filosófica y éticamente no creo que sea correcto por muchos motivos. Entre otros, quién decide quién debe nacer, que poblaciones reducir, qué estratos sociales se deben restringir, o qué continentes se deben contener. Además, ¿cuál es el motivo esa posible carencia de alimentos?. ¿Creéis que se debe a que las familias africanas tienen 4 o 5 hijos?. Seguramente no. Podéis recabar información en cualquier ONG y os daréis cuenta que cualquier europeo medio consume cantidades muy superiores a las de una familia africana.
¿Cuál es el verdadero problema?. Lo que llaman el crecimiento sostenible, el feroz consumismo. Esa trágico destino comentado no es causa del crecimiento de la población, es causa del consumo irracional de los países industrializados. Os puedo asegurar que la mayoría de los niños africanos no tienen agua potable, tienen que recorrer kilómetros en busca de agua todos los días, y es normal que lo realicen descalzos. ¿Creéis que ellos son los que están acabando con los recursos naturales?. Pero si es normal que cualquier europeo medio tenga varios pares de zapatos, o que cambie de coche cada tres años, o que se aburra de un bolso que ha estrenado solo en una ocasión. Ese es leit motiv de nuestro argumento. La economía de decrecimiento. Es decir, el hombre que habita el planeta para saciar su sed consumista, como si fuera ejercito de termitas, arrasa con todo lo que hay sobre la faz de la tierra. Y en vez, de volver a lo básico, a lo esencial, su idea es robar el derecho a las futuras generaciones a poder disfrutar del planeta que se nos ha dado. El hombre, el único animal que se autodestruye. Homo, homini lupus. Decía Hobbes. Pues bien, si el hombre quiere evitarlo debe iniciar el periodo económico de decrecimiento. El capitalista debe reducir su tamaño y el consumidor sus deseos innecesarios. Veráis como la propia población sin ningún tipo de restricciones a la natalidad, adaptará su crecimiento a las circunstancias que el planeta le brinde. Tenemos que coger conciencia de los que está ocurriendo a nuestro alrededor. Vivir es elección y sufrimiento. La tierra no puede ser habitada por avestruces.

domingo, 4 de abril de 2010

Los culpables de la crisis riden cuentas ante la ley

Estimados lectores, tres años después del comienzo de la crisis, mes arriba, mes abajo, no soy capaz de recordar,(metafóricamente hablando), los nombres de los responsables de dichas quiebras, bancarrotas y demás actividades tóxicas, que hayan comparecido ante la ley.
Si miramos de reojo a nuestras tierras castellanas, el notorio caso de la única caja de ahorros intervenida, y su presidente, el Señor Juan Pedro Hernández Moltó, brazo acusador en el pasado, recuerdese el caso del Ex-Gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, al cual televisivamente, dió lecciones de moralidad y ética.
Pues bien,¿alguién me puede señalar si este señor a comparecido ante la ley para justificar, por los acontecimientos acaecidos, su gestión nefasta?
¿Qué país que se precie puede consentir dichos acontecimientos?. ¿Qué clase de ciudadananía forma nuestra patria?
Parece ser que nuestra tierra es pasto fértil para ladrones y sinverguenzas, como redil sin vallas y cercas que protejan las ovejas de los lobos. Más bien, parece que se deja abierta la entrada.